Tratado de Austeridad Irlanda

Austeridad, NO!!!

El jueves 31 de mayo es el día de votación para “el referéndum de ratificación del nuevo tratado europeo de estabilidad fiscal”. Convocado por el Gobierno de Irlanda.

El voto a favor de la ratificación está respaldado por los tres partidos mayoritarios irlandeses: La coalición gubernamental formada por Fine Gael de Kenny y los laboristas de Gilmore; y el partido supuestamente de oposición que fue gobierno el periodo anterior, el Fianna Fáil, que anunció que hará campaña por el 'Sí' porque, según dijo su líder Micheal Martin, será "bueno para Irlanda, y lo correcto para el país y también para la Eurozona". Los tres tienen la misma política económica de recortes, ajustes y austeridad, que siempre recaen sobre los que menos tienen.

El Sinn Féin rechaza esta política y esta haciendo campaña por el NO, porque en palabras de su líder, Gerry Adams, “es malo para Irlanda y malo para la Unión Europea porque va a institucionalizar la austeridad a perpetuidad en forma de ley constitucional interna y de ley internacional”. “La cuestión es saber si el Gobierno aceptará el resultado o si volveremos a tener la habitual repetición de la consulta”, se preguntó el presidente del Sinn Féin.

El Ejecutivo irlandés presentó en diciembre unos presupuestos generales encaminados a ahorrar 3.800 millones de euros y reducir de este modo su déficit público hasta el 8,6% del Producto Interior Bruto (PIB) este año desde el 10% registrado en 2011. Todo ello en un contexto de crecimiento económico del entorno del 1,3%.

Sin embargo, el regulador del país ha dicho que ese crecimiento económico para 2012 estará muy por debajo del esperado: 0,5%. Por este motivo el Consejo cree que el Estado debe ingresar unos 400 millones de euros adicionales este año, aumentando la fiscalidad y reduciendo aún más el gasto para marcar la cifra de déficit acordada.

El nuevo pacto de disciplina fiscal, firmado a principios de marzo por 25 de los 27 miembros de la Unión Europea (UE), obligará a los países que lo suscriban a incorporar en sus legislaciones una "regla de oro" para mantener la cuentas públicas equilibradas, con sanciones financieras automáticas cuando los déficit superen el 3% del Producto Interior Bruto (PIB).

El nuevo tratado, que también establece un tope del 0,5% del PIB de déficit estructural, fue exigido por Berlín a cambio de mantener su solidaridad financiera con los países más frágiles de la Eurozona.

A finales de 2010, Irlanda, al borde de la bancarrota debido a los problemas de los banqueros, el gobierno del Fianna Fáil decidió comenzar un duro plan de rescate (que todavía continua) de 85.000 millones de euros (114.000 millones de dólares) con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un duro plan de ajuste que incluyo el despido de 24.750 personas pertenecientes a la actividad publica, baja de pensiones y suba del IVA al 23%, suba de impuestos sobre la renta, subida de la edad de jubilación a 66 años, reducción de las pensiones de los nuevos jubilados, a un 10% menos, y reducción de salarios para los activos, Los salarios de enfermeras, docentes y otros empleados públicos sufrieron recortes del 20%. Muchos tributos, como el inmobiliario y el impuesto al agua, aumentaron. La inversión en obras públicas prácticamente agoniza. Recortes en servicio de salud, los programas de protección social y los subsidios por hijo. Todo esto ha provocado el desempleo en irlanda y tan afectada por la crisis han hecho que la emigración alcance su nivel máximo de los últimos 20 años. Se estima en 75.000 ciudadanos irlandeses los que se han tenido que ir de la isla, un nivel superior al registrado a finales de la década de los ochenta. En un país con una población de 4,5 millones de habitantes, es tan grande la emigración que incluso el diario Irish Times ha creado el blog GenerationEmigration(Generación de emigrantes), cuyo encabezado simula un panel de salidas de vuelos en un aeropuerto.

Debido al creciente desempleo, los jóvenes, sobre todo hombres al final de su adolescencia o veinteañeros, se marchan a otros países europeos, a Australia y a Oriente Próximo para buscar trabajo. Las últimas cifras de la Oficina Nacional de Estadística indican que actualmente existen 356.000 ciudadanos irlandeses viviendo en Reino Unido, un número sólo superado por los inmigrantes polacos.

Y hoy el gobierno de coalición Fine gael / Laboristas pretenden hacernos creer que la economía se esta recuperando, mostrando datos de la Oficina Central de Estadísticas que ha publicado cifras que muestran que la tasa de desempleo cayó del 14,4% en febrero de 2012 al 14,3% el mes siguiente. Le decimos al gobierno que su libre interpretación falta a la verdad, ya que no es que se crearon más fuentes de trabajo, sino que la cantidad de personas que se han ido de la isla es mayor a ese digito que cambio de febrero a marzo.

“Tras un año del Fine Gael y Partido Laborista en el gobierno, es evidente que las políticas de austeridad de este y el último gobierno del Fianna Fáil demuestran que no esta funcionando”.

Gerry Adams Presidente del Sinn Féin